Puro, de Julianna Baggott

Nombre: Puro

Título Original: Pure

Autora: Julianna Baggott

Páginas: 432

Serie: Puro #1

Género: Distopía, Juvenil

Año: 2012 

Sinopsis:

“Pressia apenas se acuerda de las Detonaciones y menos todavía de cómo era la vida en el Antes. En el armario donde duerme, entre los escombros de una antigua barbería piensa en cómo el mundo se transformó en ceniza, polvo, cicatrices, quemaduras y cuerpos dañados, fundidos con objetos extraños. Están aquellos que se escaparon del Apocalipsis sin daño alguno, los Puros. Viven a salvo, dentro de la Cúpula que protege sus vidas, seres superiores y sanos. Pero Perdiz, cuyo padre es uno de las personas más influyentes de la Cúpula, se siente aislado y solo. Cuando por casualidad escucha unas palabras que le indican que su madre podría continuar viva, Perdiz lo arriesga todo, incluida su vida para salir a buscarla. Y ahí es cuando se topará con Pressia”.

He tardado nada más y nada menos que un mes en leer este libro. Si bien es cierto que en las últimas semanas mis ganas de leer parece ser que escaparon por la ventana, tampoco este ha sido un libro que las hiciese volver, sobre todo al principio. Pero voy por partes:

Lo primero, es que ha habido gente que ha comparado esta novela con Los Juegos del Hambre, y a Katniss con nuestra nueva protagonista, Pressia; y sobre esto tengo que decir una sola cosa: no he encontrado semejanzas de ningún tipo entre los dos libros, ni Pressia me ha recordado en ningún momento a Katniss. Dicho esto, paso a otra cosa.  

Puro es una distopía de la que, tal vez, esperaba demasiado. Nos sitúa en un mundo devastado tras un holocausto nuclear que ha acabado con la vida tal y como la conocemos hoy en día, y donde sobrevivir es un todo un reto. La ciudad se ha vuelto un lugar peligroso, la comida escasea, y los animales y las personas han mutado. Los miserables, que así se llaman,  tienen sus cuerpos quemados, deformes y tienen anclados en el cuerpo cualquier objeto que tuvieran cerca en el momento de las detonaciones.

Y luego está La Cúpula, un lugar seguro donde viven Los Puros, gente normal que tuvo la ¿suerte? de escapar de aquel desastre y viven sin complicaciones de ningún tipo.

Este mundo creado por Baggott me ha resultado un poco asfixiante y oscuro. Como toda distopía, es una novela dura en algunos momentos y donde los protagonistas sufren más de lo que deberían. Y creo que de haberla leído en otro momento, mis conclusiones hubiesen sido diferentes. No he conseguido empatizar al cien por cien con ningún personaje ni meterme de lleno en la historia como me ha ocurrido con otros libros de este tipo. (Creo que debo dejar el género distópico por un tiempo). Las primeras cien páginas me costaron bastante, incluso pensé en dejar el libro y volver con él más adelante, sin embargo no lo hice, y la historia fue cogiendo un poco de fuerza y ritmo conforme iba pasando capítulos. No hizo que me metiera en la historia, pero al menos consiguió que me costase menos coger el libro.

El tipo de narración que ha usado Baggott si es diferente a todo lo que visto hasta ahora. Está narrada en tercera persona, pero contando la historia, no desde el punto de vista de un personaje  o dos, sino de varios. Al principio esto no me convencía del todo, pero al final ha acabado gustándome, porque he tenido la oportunidad de conocer mejor a cada uno de los personajes y no sólo a los claros protagonistas.

La prosa es otra de las cosas que no me ha disgustado. No se me ha hecho demasiado pesada y ha sido muy ágil en más de una ocasión. Además, ha conseguido que me imagine lugares o personas, con descripciones breves y nada pesadas.

Los personajes no han estado mal. Mi favorita ha sido, sin duda, Pressia. Es una joven de dieciséis años que viven en una barbería abandonada con su abuelo, y que tiene una muñeca en el sitio donde debería estar su mano izquierda. Es fuerte, valiente y con personalidad.

Bradwell es mi segundo personaje favorito. Vive, como Pressia, fuera de La Cúpula. Al principio no me gustaba demasiado, sobre todo por esas clases de historia que se empeñaba en darle a todo el mundo, pero al final me ha gustado mucho y su relación con Pressia ha sido una de las mejores cosas de la novela.

Perdiz, personaje principal en la historia, es un Puro que a pesar de tener una vida mucho más sencilla que los que viven fuera, también tiene sus cicatrices y sus buenas dosis de dolor. No me ha caído mal, lo que no es bueno si tenemos en cuenta que es uno de los protas.

El final no me gustó demasiado. Puede que porque me esperase otra cosa diferente a lo que paso ¿quién sabe? Ahora sólo quedar esperar a que llegue la segunda parte y ver cómo se desarrollan los acontecimientos.

En conclusión: Puro es un libro con un buen argumento, buenos personajes y buena narración, pero al que le falta ese “algo” para que te enganche y consigas meterte de lleno en la historia.

3.5/5