Título Original:
Rubinrot
Autora: Kerstin Gier
Páginas: 368
Serie: El amor más allá del tiempo 1/3
Género: Juvenil, Fantástico
Año: 2010
Sinopsis:
Cruza
las fronteras del tiempo y encuentra el verdadero amor.
“Como cualquier otro día, regresé pronto a casa al salir del instituto.
Mi tía se había quedado sin sus dulces favoritos y me ofrecí para ir a la
tienda a comprar más. Pero de camino empecé a sentir algo muy extraño: las
piernas me temblaban y tuve una sensación rara en el estómago. De repente, la calle
desapareció ante mis ojos. Poco después reapareció, pero muchas cosas eran
diferentes. Había vuelto al pasado. Me llamo Gwen y soy la última viajera en el
tiempo. Así empieza la aventura de mi vida".
Gwendolyn es una joven
de dieciséis años, con una vida de lo más tranquila, si pasamos por alto el
hecho de que tiene la capacidad de ver fantasmas y su familia es portadora del
gen de los viajeros del tiempo.
Toda su familia cree
que la portadora del gen es Charlotte, la prima de Gwen, pero cuando ésta
última va a hacerle un recado a su tía Maddy, siente un profundo mareo y
retrocede al pasado. Así es como comienza
todo.
Para empezar,
simplemente diré “¡Guauu!”. Había
empezado a leer este libro porque lo había visto miles de veces por internet y
las críticas eran bastante positivas, y la verdad es que con razón.
A pesar de que es un
libro bastante juvenil (pensé que no me gustaría por esto), y de que el tema de
los viajes en el tiempo no era algo que me llamase especialmente la
atención, tengo que decir que engancha
desde las primeras páginas. Está escrito en primera persona por Gwen, la
protagonista (punto positivo para la autora). Los capítulos de los que se
compone el libro no son demasiado largos, y su ritmo narrativo es ligero, lo
que hace que la lectura no resulte pesada en ningún momento.
El libro es bastante
introductorio, pero no en exceso. De hecho lo es porque debe serlo (sino lo
fuese, una no se enteraría de nada), pero no por ello es un libro pesado o
repetitivo. Aunque tengo que reconocer, que aunque la lectura es muy sencilla,
a veces me perdía con las explicaciones de “los doce”, la logia y demás (pero
vamos, que eso es por mí, no por el libro).
Comienza con un
prólogo del que no entendí nada hasta pasadas unas cuantas páginas, y continúa
contándonos la vida de Gwen y de su peculiar familia, para pasar después a
contarnos el mayor cambio de su vida y sus primeros viajes en el tiempo. Que no
hará sola, sino en compañía del guapo pero arrogante Gideon. La historia entre
los dos no es que no me haya gustado, es que me la esperaba más… ¿profunda? Sí,
creo que esa es la palabra. Primero piensas que Gwen no es para nada el tipo de
Gideon (de hecho, son palabras textuales de él) y luego… en fin.
El final, en cambio me
dejó un poco fría. Pensé “¿se acaba aquí? ¡No puede ser!” Pero si, se acabó.
Por eso la segunda parte se coge con muchas ganas para saber qué es lo que va a
ocurrir.
En cuanto a los
personajes, la verdad es que podría destacar a muchos (no como en otras
novelas): En primer lugar esta Gwen, como ya he dicho antes, la prota. Si digo
que me ha caído genial no estaría siendo sincera del todo, pues me ha caído
todavía mejor. Me he identificado con ella en multitud de ocasiones y me he
reído un montón con sus pensamientos disparatados y sus comentarios ingeniosos.
Me encanta la escena en la que (¡spoiler!) conoce al Conde Sant Germain, y para
que éste no escuche sus pensamientos se pone a cantar una canción. ¡Increíble! (Fin spoiler)
Luego esta Gideon,
compañero de viajes de Gwen y encargado de protegerla en cada salto. Es
bastante desconcertante. A veces, no se si le daría un beso o un puñetazo (sin
ánimo de parecer agresiva). Pero incluso llegué a pensar que era “uno de los
malos”. Al final, consiguió caerme bien.
Leslie, la mejor amiga
de Gwen es otro de mis personajes favoritos. Medio detective, y conocedora del
gen de los viajes en el tiempo, este personaje lo tiene todo para que también
fuese mi mejor amiga.
Charlotte, la prima de
Gwen, mira que he intentado entenderla en un sin fin de ocasiones, pero
simplemente ¡no puedo con ella! Me da mucha rabia cuando menosprecia a Gwen.
Y luego está el Conde
de Saint Germain, que no me inspiró confianza en ningún momento y que incluso
me llegó a dar miedo ¡en serio, miedo! No sé por qué me recuerda al Conde
Drácula (ya ves tú, qué tontería).
En conclusión: Rubí es
el primer libro de una saga que promete y con el que pasareis un rato muy
agradable leyéndolo. Si tenéis la oportunidad, no dudéis en leerlo, porque
merece la pena.
4.5/5
te seguiré :) gracias por pasar por mi blog, haré lo mismo. Esta trilogía es una de mis favoritas <3
ResponderEliminarNos leemos.
Andrea xx